lunes, 19 de abril de 2021

Almendras garrapiñadas

Un día me preguntó mi marido si sabía hacer garrapiñadas. Le dije que no había hecho nunca, a lo que me contestó que si me había planteado probar... En fin, una insinuación velada de: "¿Me haces garrapiñadas?". Así que me puse a buscar recetas por internet y vi algunos vídeos en youtube para informarme bien. La variación entre las recetas es mínima.

No se le ocurrió mejor cosa que pedirle a un compañero de trabajo, cuya familia tiene campos de almendros, que le trajera un saco. ¡Un saco! Así que llevo meses cascando almendras. Eso sí, con un artilugio que hizo mi suegro que facilita bastante el trabajo.

Bueno, se tarda como unos 25 minutos en hacer y la verdad es que sale bastante cantidad y se conservan mucho tiempo, así que merece la pena.

INGREDIENTES:

- 1 tazón de almendras crudas.
- 1 tazón de azúcar.
- poco menos de 1 tazón de agua.

PREPARACIÓN:

Primero se pone una sartén a fuego fuerte y se vierten los tres ingredientes. Cuando empiece a hervir se baja el fuego al medio o un poco más (de 9 a 6, de 12 a 8, de 3 a 2, depende de la graduación de nuestros fuegos).
Durante todo el rato hay que remover con una cuchara de madera. Veremos cómo se va reduciendo el líquido. 
Llegará un momento en que se cree como una especie de arena, que es el momento en que se empieza a adherir el azúcar a las almendras, y poco después se volverá a derretir la capa superficial convirtiéndose en el caramelo de las almendras. Las sacamos de la sartén cuando veamos que tienen una capa marrón brillante.
Se vierten extendidas sobre un papel de horno hasta que se enfríen para poder manipularlas. 

TRUCOS:

Es fundamental protegerse las manos ya que, si nos salta en algún momento, hay que tener en cuenta que las de caramelo son de las peores quemaduras. Yo utilizo unos guantes de algodón, pero cada uno lo que tenga a mano.
No he puesto tipo de azúcar, se pueden hacer tanto con azúcar blanco como con azúcar moreno y quedan prácticamente igual.
El tamaño de la sartén dependerá de las cantidades. Hay que tener en cuenta que cuando se crea la arenilla se hace más difícil darle vueltas, así que mejor pecar de sartén grande.
Si tardamos mucho en sacarlas de la sartén, una vez que se ha hecho el caramelo, se empezará a quemar, así que hay que estar pendiente y sin dejar de remover en todo momento.
Una vez frías lo mejor es guardarlas en un bote de cristal para que se conserven en perfecto estado.







No hay comentarios:

Publicar un comentario